El primero ha sido un bloque de información general.
Nos hemos dado cuenta de lo que comemos, y hemos aprendido cosas sobre la composición de lo que comemos y para qué sirve cada una de la cosas que nos llevamos a la boca a diario. De momento es eso, información general, pero ya nos sirve para darnos cuenta de los errores que podemos cometer habitualmente, sobre todo de lo que debemos comer y de aquello que no podemos permitirnos.
Cuando vamos al cine, normalmente buscamos información sobre la película que vamos a ver, sobre el director, los actores, el género, la trama... Sin embargo, muchas a veces comemos cosas que no sabemos de dónde vienen, ni de qué están hechas, ni cuáles son los beneficios o por perjuicios que nos traerán.
Con nuestros alumnos debemos hacer lo mismo: informarles de todo lo relativo a la alimentación, ya que está también forma parte de una buena educación. Las horas de tutoría, en la que todo es mucho más relajado, son aquellas en las que podemos dar cabida a este tipo de contenidos.
Yo esta misma semana voy a probar con mis alumnos el juego que he ideado para la actividad anterior. Ya os contaré cuál ha sido el resultado.
Un saludo.
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